<div align="left">Eso, eso, a estudiar que ya te conocemos..... (risas)) </div>
<div align="left"> </div>
<div align="left">A veces me da vergüenza hablar tanto de Luchi, pero necesito contárselo a alguien y no veo a tanta gente interesada a mi alrededor. Además me pongo en el lugar de Iris y me gustaría saber como lo lleva por lo menos hasta que se adapten. Por otra parte vosotras podéis ayudarme, darme consejos, animarme, os puede servir como experiencia... Así que al final me da más vergüenza no contarlo...</div>
<div align="left"> </div>
<div align="left">Sobre el Niño te entiendo. El otro día estuve hablando de mi perro que murió hace unos 15 años (o más) y terminé llorando. Sin embargo, normalmente no me pasa eso, suelo recordarle con alegría, pero a veces es inevitable.</div>
<div align="left"> </div>
<div align="left">Me alegro de que te anime respecto a Kitty. Es una alegría poder servir de ayuda a alguien. De todas formas lo fundamental que los otros gatos estén tranquilos. Si Byakko hubiese reaccionado como con Suzaku (acosándola todo el día), aquí tendríamos montada una muy gorda. Hay que ser muy paciente y sudar tinta, y sobre todo mantener muy alto el ánimo, pensando que es posible. A mí me echaba mucho para atrás el miedo de Luchi, pero lo está superando mucho mejor de lo que pensaba. Hay avances casi a diario. Son cosas pequeñas, y a veces las hace y otras no, pero como dice el refrán, “grano no hace granero, pero ayuda al compañero”. Seguro que Kitty consigue aprender a convivir con los demás (ok) .</div>
<div align="left"> </div>
<div align="left">Y a mí tampoco me funcionan los ruidos, los noes... Los noes cuando me funcionan es porque le digo No mientras hago algo que le disgusta, y al final cuando digo No ya lo relaciona con algo malo. Pero hace mucho que no lo hago y ya se le ha olvidado....</div>
<div align="left"> </div>
El problema que tiene Luchi es uno de los que más me apena de los gatos que buscan casa. A mí me dan mucha pena los que son amigos y los que no soportan vivir con otros gatos. Los primeros porque es casi seguro que nadie les va a adoptar juntos. Los segundos porque tienen que vivir durante meses con otros gatos a los que no aguantan en un espacio no demasiado amplio. Por mucho que lo deseen en las Protectoras habitualmente no pueden mantenerles aislados de los otros gatos, y lo pasan muy mal. Al final me decidí a coger a Luchi porque ya estaba viviendo con otros gatos y porque nadie más se interesaba. Además mi casa es grande y puede mantenerse separado si quiere.