Buenos días Pale, buenos días a todas.
Hoy estoy chof... Ayer me llevé un disgustazo terrible.
En la protectora de Murcia (por llamarla de alguna forma, porque más parece una perrera) están viviendo perros y gatos en condiciones infrahumanas, les dan de comer carcasas y patas de pollo, nada de pienso, tienen a hembras y machos en la misma jaula y sin esterilizar con lo que las hembras se quedan preñadas, hay muchísimos perros enfermos, no hay asistencia veterinaria... estoy con un mal cuerpo... Hablaré de ello en mi blog, que ahora no tengo ganas y además estoy hasta arriba de curro.
Y bueno, no quería contar esto que voy a contar porque en su día cometí un gran error del que no estoy precísamente orgullosa, pero necesito desahogarme, necesito contarlo aquí. Hace casi 4 años tuvimos que dejar un perro en ese lugar, sin saber nada de esto, y ahora me siento en la obligación de rescatarlo, si aún sigue con vida. Así que Jose contactó ayer con una chica con algún tipo de relación con la protectora, no sabemos cuál, porque no aceptan voluntarios a pesar de los 400 perros y 130 gatos que tienen y sólo dos personas trabajando, bueno, el caso es que le hemos mandado una foto del perro y dice que lo va a buscar, a ver si sigue allí todavía. De verdad que me siento como una mierda humana, nosotros no pudimos hacernos cargo de ese perro, tampoco estábamos preparados para un perro así, fué un calvario, y lo llevamos a la protectora como último recurso, tras un montón de intentos fallidos con él. Era un perro extremadamente nervioso y celoso y en aquel momento no supimos encontrarle solución, tampoco pudimos encontrarle un dueño. En fin, ya lo he dicho. Es algo que siempre llevaré dentro, un malestar que jamás se esfumará. No espero palmaditas en la espalda, sé que fué algo imperdonable, y por ello ahora necesito enmendarlo y encontrarle un hogar a ese perro, no puede seguir en la "protectora" bajo esas condiciones, aunque tenga que sacrificar todo mi tiempo y dinero, si sigue vivo, quiero hacer eso por él. Se lo debo.
Espero de todo corazón que llegue a perdonarme algún día, y poder vivir en paz conmigo misma.