Acabo de leer un libro sobre animales abandonados, y uno de los casos me asombró mucho. Puede ser muy interesante para las personas que teneis gatos que se muestran esquivos o indiferentes. Lo cuenta una persona que trabaja en una protectora de animales.
"Es reveladora la anécdota de una persona que abandono a su gato porque no era nada cariñoso y nunca se acercaba ni se dejaba acariciar. Sin embargo, una vez abandonado, el gato entró en una profunda depresión. Se pidió al dueño que regresara al albergue y, de inmediato, el animal presentó una mejoría en su estado. El dueño tuvo que reconocer que al gato no le resultaba indiferente, sino que vivía en 'su mundo', un mundo quiza distinto, de gatos."
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"Realmente, muchos propietarios no se dan cuenta de la importancia que tienen para sus animales domésticos. En el caso de los gatos no es necesario que sean zalameros, su frialdad no implica desapego".
Respecto a lo que pasó con el gato de la historia, el libro no lo dice. O bien su dueño volvió a llevarselo a casa, o lo dejó en el albergue. Personalmente me gusta pensar lo primero.
"Es reveladora la anécdota de una persona que abandono a su gato porque no era nada cariñoso y nunca se acercaba ni se dejaba acariciar. Sin embargo, una vez abandonado, el gato entró en una profunda depresión. Se pidió al dueño que regresara al albergue y, de inmediato, el animal presentó una mejoría en su estado. El dueño tuvo que reconocer que al gato no le resultaba indiferente, sino que vivía en 'su mundo', un mundo quiza distinto, de gatos."
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"Realmente, muchos propietarios no se dan cuenta de la importancia que tienen para sus animales domésticos. En el caso de los gatos no es necesario que sean zalameros, su frialdad no implica desapego".
Respecto a lo que pasó con el gato de la historia, el libro no lo dice. O bien su dueño volvió a llevarselo a casa, o lo dejó en el albergue. Personalmente me gusta pensar lo primero.