Hace poco entró el tercer gato en mi casa. Quería compartir con vosotros cómo ha sido la cosa y compartir mi experiencia por si a alguien le puede interesar.
En octubre cogí un gatito de unos dos meses (Byakko, mi bebé). Después de un comienzo difícil empezó a ser muy cariñoso. Me di cuenta de que necesitaba compañía y en enero adopté a Suzaku (mi pequeña dama). Byakko la acosaba y le agitaba la patita. Tuvieron muchos revolcones, y la gata soltaba mucho pelo en las peleíllas, aunque no se hacían daño realmente. Finalmente a mediados de febrero firmaron la paz. Ahora son grandes amigos y solo pelean jugando.
Me costó mucho relacionarme con la gata porque mi gatito se ponía muy celoso. Cada vez que me acercaba a ella, él venía corriendo a interponerse y empezaba una pelea. He tenido mucha suerte y muchos gatos tienen comienzos peores, pero fue muy estresante y a veces me daban ganar de ahorcar a alguno (frecuentemente Byakko).
No era mi intención tener más gatos de momento. En el futuro, cuando mi padre se muera y viva sola, sí quería tener más gatos, pero de momento mi intención era seguir sólo con estos dos. Además quería disfrutar de la paz. Entoces ¿porqué ahora tengo tres gatos?.
Para responder tengo que remontarme al pasado. En Semana Santa dos miembros de este Foro encontraron un gato al parar a tomar algo. Estaba herido y hambriento, y sobre todo abandonado y necesitado de afecto. Se lo llevaron. Cuando se dieron cuenta de que no podían quedárselo lo pusieron en adopción. Cuando leí el anuncio algo en mi interior me dijo que tenía que quedármelo. No dije nada porque Luchi le tenía miedo a los gatos y yo tengo dos. Sin embargo, unos días después decidí adoptarlo. Hace ya 14 días que está en mi casa.
No fue algo premeditado. No sé qué es lo que me hizo tener esa reacción. Cuando veo los gatos en adopción me los quedaría a todos. Pero con este hubo algo especial. Y no es solo que sea muy bonito. Hay muchos gatos bonitos. Pero hubo algo que me llegó muy dentro y por eso, hoy Luchi está en mi casa.
Cuando llegué con él deje que los otros dos oliesen el transportín. Su reacción fue buena, sólo curiosidad. Luchi desde dentro les gruñía y les bufaba. Le he tenido varios días aislado, los otros se han colado alguna vez (sobre todo mi gatito). Me he dado cuenta de que es cierto que Luchi tiene miedo de los otros gatos, porque aunque gruñe mucho no es nada agresivo. Eso causa un problema porque les gruñe, y Byakko se va corriendo, pero Suzaku a veces responde atacándole. Afortunadamente sólo son enfrentamientos rápidos y sin consecuencias. Su propio miedo está causando reacciones agresivas y esto es una pena.
Hace 3 días abrí la puerta de la habitación de Luchi. Me hubiese gustado esperar más, pero por una parte los otros gatos cada vez estaban más interesados en entrar, Luchi empezaba a luchar por salir, y mi padre estaba empezando a abrir demasido la puerta (no recuerda que no debe hacerse). Decidí que era mejor aprovechar que tenía 4 días de estar en casa para ver las reacciones, y que no hubiese un accidente casi seguro la semana próxima.
El resultado ha sido bueno de momento. El primer día hubo mucha curiosidad y mucho gruñido. Cada día los dos veteranos se interesan menos por el nuevo (van amenos a ver lo que hace), y el nuevo les deja aproximarse más sin gruñir. A veces van uno o los dos a buscar a Luchi y se tumban cerca a observarle (primero se acercan y luego se alejan cuando Luchi les gruñe). Están en un estado de guerra fría. De momento Luchi se va a los lugares que los otros frecuantan menos.
Supongo que con el tiempo irán acostumbrandose y acercándose más. Es probable que entonces, con la cercanía, aumenten los enfrentamientos. En todo caso no creo que escalen mucho en violencia. En 2-3 meses espero que nos hallamos olvidado de todo esto. Tal vez tardemos más, pero prefiero ser optimista.
Sin haberlo buscado tengo tres gatos bien distintos en color, dibujo, y temperamento. Son una buena representación de la variedad que pueden presentar los gatos. Suzaku es arlequín negra con ojos ambar, Byakko tabby gris con ojos verdes (los tenía amarillos pero están cambiando de color), y Luchi es un colourpoint con ojos azules. Si seguimos así el siguiente debería ser una tortie con ojos naranja (jeje) o algo similar.
Lo más curioso de todo es que el más veterano es también el más jóven. Suzaku tiene 4 años y medio, Luchi tiene 2 años, y Byakko 9 meses. Todas las edades son aproximadas, la más segura es la de Byakko porque era muy pequeño cuando lo cogí. Los tres han salido de la calle y es imposible saber su edad exacta.
En cuanto al temperamento Byakko es un jovencito curioso e imprudente, y también muy celoso. Suzaku es muy tranquila y se sabe reaccionar con mucha frialdad. No es dominante y suele ceder, pero cuando algo le interesa lo consigue. Luchi todavía no se bien como es. Su miedo a los otros dificulta conocerle, pero sé que en su interior hay un gato muy cariñoso y hogareño que desea manifestarse. De los tres es el más socializado, no tiene ningún miedo de nosotros, y se pasea por la casa con tranquilidad (bueno lo haría si no fuese por los otros gatos).
Después de releer lo que he escrito me imagino algunas reacciones a lo de "el próximo":
- Cuatro gatos, que envidia...
- Cuatro gatos, está loca...
- Cuatro gatos, qué pocos...
....
No es que esté pensando en el cuarto, como he dicho el tercero no ha sido premeditado, simplemente era un comentario jocoso. Así que no empeceis a ofrecerme gatos ¿vale?. Es posible que algún día os cuente como finaliza la guerra fría, y si pasa a guerra caliente, y si se han hecho amigos (y si el cuarto es una tortie con ojos de cobre :roll: o empiezo a repetirme, aunque hay muchas combinaciones que todavía no tengo (jeje) ).
Al fin y al cabo tres no son tantos ¿verdad?
En octubre cogí un gatito de unos dos meses (Byakko, mi bebé). Después de un comienzo difícil empezó a ser muy cariñoso. Me di cuenta de que necesitaba compañía y en enero adopté a Suzaku (mi pequeña dama). Byakko la acosaba y le agitaba la patita. Tuvieron muchos revolcones, y la gata soltaba mucho pelo en las peleíllas, aunque no se hacían daño realmente. Finalmente a mediados de febrero firmaron la paz. Ahora son grandes amigos y solo pelean jugando.
Me costó mucho relacionarme con la gata porque mi gatito se ponía muy celoso. Cada vez que me acercaba a ella, él venía corriendo a interponerse y empezaba una pelea. He tenido mucha suerte y muchos gatos tienen comienzos peores, pero fue muy estresante y a veces me daban ganar de ahorcar a alguno (frecuentemente Byakko).
No era mi intención tener más gatos de momento. En el futuro, cuando mi padre se muera y viva sola, sí quería tener más gatos, pero de momento mi intención era seguir sólo con estos dos. Además quería disfrutar de la paz. Entoces ¿porqué ahora tengo tres gatos?.
Para responder tengo que remontarme al pasado. En Semana Santa dos miembros de este Foro encontraron un gato al parar a tomar algo. Estaba herido y hambriento, y sobre todo abandonado y necesitado de afecto. Se lo llevaron. Cuando se dieron cuenta de que no podían quedárselo lo pusieron en adopción. Cuando leí el anuncio algo en mi interior me dijo que tenía que quedármelo. No dije nada porque Luchi le tenía miedo a los gatos y yo tengo dos. Sin embargo, unos días después decidí adoptarlo. Hace ya 14 días que está en mi casa.
No fue algo premeditado. No sé qué es lo que me hizo tener esa reacción. Cuando veo los gatos en adopción me los quedaría a todos. Pero con este hubo algo especial. Y no es solo que sea muy bonito. Hay muchos gatos bonitos. Pero hubo algo que me llegó muy dentro y por eso, hoy Luchi está en mi casa.
Cuando llegué con él deje que los otros dos oliesen el transportín. Su reacción fue buena, sólo curiosidad. Luchi desde dentro les gruñía y les bufaba. Le he tenido varios días aislado, los otros se han colado alguna vez (sobre todo mi gatito). Me he dado cuenta de que es cierto que Luchi tiene miedo de los otros gatos, porque aunque gruñe mucho no es nada agresivo. Eso causa un problema porque les gruñe, y Byakko se va corriendo, pero Suzaku a veces responde atacándole. Afortunadamente sólo son enfrentamientos rápidos y sin consecuencias. Su propio miedo está causando reacciones agresivas y esto es una pena.
Hace 3 días abrí la puerta de la habitación de Luchi. Me hubiese gustado esperar más, pero por una parte los otros gatos cada vez estaban más interesados en entrar, Luchi empezaba a luchar por salir, y mi padre estaba empezando a abrir demasido la puerta (no recuerda que no debe hacerse). Decidí que era mejor aprovechar que tenía 4 días de estar en casa para ver las reacciones, y que no hubiese un accidente casi seguro la semana próxima.
El resultado ha sido bueno de momento. El primer día hubo mucha curiosidad y mucho gruñido. Cada día los dos veteranos se interesan menos por el nuevo (van amenos a ver lo que hace), y el nuevo les deja aproximarse más sin gruñir. A veces van uno o los dos a buscar a Luchi y se tumban cerca a observarle (primero se acercan y luego se alejan cuando Luchi les gruñe). Están en un estado de guerra fría. De momento Luchi se va a los lugares que los otros frecuantan menos.
Supongo que con el tiempo irán acostumbrandose y acercándose más. Es probable que entonces, con la cercanía, aumenten los enfrentamientos. En todo caso no creo que escalen mucho en violencia. En 2-3 meses espero que nos hallamos olvidado de todo esto. Tal vez tardemos más, pero prefiero ser optimista.
Sin haberlo buscado tengo tres gatos bien distintos en color, dibujo, y temperamento. Son una buena representación de la variedad que pueden presentar los gatos. Suzaku es arlequín negra con ojos ambar, Byakko tabby gris con ojos verdes (los tenía amarillos pero están cambiando de color), y Luchi es un colourpoint con ojos azules. Si seguimos así el siguiente debería ser una tortie con ojos naranja (jeje) o algo similar.
Lo más curioso de todo es que el más veterano es también el más jóven. Suzaku tiene 4 años y medio, Luchi tiene 2 años, y Byakko 9 meses. Todas las edades son aproximadas, la más segura es la de Byakko porque era muy pequeño cuando lo cogí. Los tres han salido de la calle y es imposible saber su edad exacta.
En cuanto al temperamento Byakko es un jovencito curioso e imprudente, y también muy celoso. Suzaku es muy tranquila y se sabe reaccionar con mucha frialdad. No es dominante y suele ceder, pero cuando algo le interesa lo consigue. Luchi todavía no se bien como es. Su miedo a los otros dificulta conocerle, pero sé que en su interior hay un gato muy cariñoso y hogareño que desea manifestarse. De los tres es el más socializado, no tiene ningún miedo de nosotros, y se pasea por la casa con tranquilidad (bueno lo haría si no fuese por los otros gatos).
Después de releer lo que he escrito me imagino algunas reacciones a lo de "el próximo":
- Cuatro gatos, que envidia...
- Cuatro gatos, está loca...
- Cuatro gatos, qué pocos...
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No es que esté pensando en el cuarto, como he dicho el tercero no ha sido premeditado, simplemente era un comentario jocoso. Así que no empeceis a ofrecerme gatos ¿vale?. Es posible que algún día os cuente como finaliza la guerra fría, y si pasa a guerra caliente, y si se han hecho amigos (y si el cuarto es una tortie con ojos de cobre :roll: o empiezo a repetirme, aunque hay muchas combinaciones que todavía no tengo (jeje) ).
Al fin y al cabo tres no son tantos ¿verdad?