He recibido un SMS de mi amiga contándome que ayer murió su gata Peggy de 18 años. Su propietaria se había marchado de vacaciones y llevaba casi 2 semanas sin verla hasta que llegó su hora. Poco antes la habían llevado al veterinario y éste dijo que se encontraba relativamente bien en relación a su edad, pero que deberían tratar de que llevase una vida lo más relajada y consentida posible.
En las últimas semanas antes de que mi amiga se fuese de vacaciones, Peggy requería constantes atenciones y mimos, cada vez que mi amiga se iba a dormir, Peggy subía a la cama de mi amiga para que esta la acariciase. Cuando ésta dejaba por un momento de hacerlo, Peggy le daba unos toquecitos con la patita indicándole que siguiera con sus caricias.
Antes de que partiese, le comenté a mi amiga que tal como estaba la gata, sería mejor que se la llevase con ella de vacaciones ya que su apoyo sentimental le resultaba casi imprescindible para seguir adelante. De hecho mi amiga reservó, con unos familiares, una casa en el Ampurdán, a una hora en coche desde Barcelona. Mi amiga me dijo que Peggy quizás no aguantaría el viaje.
Descanse en paz.
En las últimas semanas antes de que mi amiga se fuese de vacaciones, Peggy requería constantes atenciones y mimos, cada vez que mi amiga se iba a dormir, Peggy subía a la cama de mi amiga para que esta la acariciase. Cuando ésta dejaba por un momento de hacerlo, Peggy le daba unos toquecitos con la patita indicándole que siguiera con sus caricias.
Antes de que partiese, le comenté a mi amiga que tal como estaba la gata, sería mejor que se la llevase con ella de vacaciones ya que su apoyo sentimental le resultaba casi imprescindible para seguir adelante. De hecho mi amiga reservó, con unos familiares, una casa en el Ampurdán, a una hora en coche desde Barcelona. Mi amiga me dijo que Peggy quizás no aguantaría el viaje.
Descanse en paz.