Tu vida fue muy corta. Fuiste un gatito desde el primer día rechazado por tu madre biológica.
Cuando os recogí a tu hermanita y a ti eráis como 2 ratillas ya que acababais de nacer y tu eras más ratilla todavía. Eras la mitad que tu hermana y todos pensaban que no pasarías de ese fin de semana pero como un campeón comías poquito y seguias para adelante. Durante 2 semanas estuvisteis juntos tu hermanita y tú en esa cajita bebiendo con ansia esos bibes que os preparaba, tu hermana bebió con tanta ansia que cogió una neumonia por aspiración y murió pero tu seguistes para adelante contra todo pronóstico.
Seguías siendo tan pequeño que durante un tiempo te seguimos llamando Ratilla pero ya no querías estar en la caja, se te hacía pequeña para ti y querías ver mundo y a tus compañeras de piso Lily y Teta. Ellas te aceptaron desde el primer día, Teta era más relajada contigo pero Lily sólo tenía ansia de jugar contigo y de besarte, jugaba tan bruta que a veces teníamos que reñirla pero ante todo te quería mucho.
Eras un gatito bueno y cariñoso, siempre chiquitín pero un luchador que intentaba ponerse de pie desde muy pequeño. Era muy dificil ponerte un nombre, al final despues de muchas dudas te quedaste con Hiru.
Tus dos últimos días los pasaste en mis brazos, no parabas de rozarte contra mi en cualquier momento como si supieras que tu final estaba llegando y quisieras agradecerme las noches que pasé dándote el biberón y durmiendo en el sofá.
Cuando llegó tu final te dormiste en mi brazos con mis lágrimas y las de tu papi despidiéndote porque aunque al principio fuiste un gatito rechazado siempre has sido un gatito muy querido y nunca nos olvidaremos de ti.
Cuando os recogí a tu hermanita y a ti eráis como 2 ratillas ya que acababais de nacer y tu eras más ratilla todavía. Eras la mitad que tu hermana y todos pensaban que no pasarías de ese fin de semana pero como un campeón comías poquito y seguias para adelante. Durante 2 semanas estuvisteis juntos tu hermanita y tú en esa cajita bebiendo con ansia esos bibes que os preparaba, tu hermana bebió con tanta ansia que cogió una neumonia por aspiración y murió pero tu seguistes para adelante contra todo pronóstico.
Seguías siendo tan pequeño que durante un tiempo te seguimos llamando Ratilla pero ya no querías estar en la caja, se te hacía pequeña para ti y querías ver mundo y a tus compañeras de piso Lily y Teta. Ellas te aceptaron desde el primer día, Teta era más relajada contigo pero Lily sólo tenía ansia de jugar contigo y de besarte, jugaba tan bruta que a veces teníamos que reñirla pero ante todo te quería mucho.
Eras un gatito bueno y cariñoso, siempre chiquitín pero un luchador que intentaba ponerse de pie desde muy pequeño. Era muy dificil ponerte un nombre, al final despues de muchas dudas te quedaste con Hiru.
Tus dos últimos días los pasaste en mis brazos, no parabas de rozarte contra mi en cualquier momento como si supieras que tu final estaba llegando y quisieras agradecerme las noches que pasé dándote el biberón y durmiendo en el sofá.
Cuando llegó tu final te dormiste en mi brazos con mis lágrimas y las de tu papi despidiéndote porque aunque al principio fuiste un gatito rechazado siempre has sido un gatito muy querido y nunca nos olvidaremos de ti.