Muy buenas a todos,
Quiero contaros la historia de un gato que apareció por mi casa hace unos meses para que me deis consejos y me orienteis si lo considerais oportuno. Quizás se haga un poco larga la explicación, pido perdón por anticipado, pero ya nos conocemos hace un par de meses y hay varias aventuras qué contar y dudas que me surgen a cada momento.
Vivo en una calle privada peatonal cuando una noche veo a un gato con correa en mitad de la calle, le grito,"eh! tú, dónde vas?? Y en lugar de asustarse se vino para mí y se puso a rozarse con mis piernas. ¿se habrá escapado? ¿lo habrán abandonado? Por si acaso le pusimos agua en el porche y nos fuimos a dormir. Durante los dos días siguientes (sabado y domingo) estuvo rondando por la calle, por lo que mi intención era llevarlo el lunes al veterinario para ver si tenía chip y si no al menos me aconsejase qué hacer con el gato. Pero por motivos laborales tuve que salir de viaje toda la semana. A la vuelta el gato ya no estaba, por lo que nos olvidamos del mismo.
A las dos semanas volvió a aparecer por el barrio, pero esta vez se aposentó en mi porche. También coincidio con fin de semana por lo que le dimos de comer y agua. Volví a salir de viaje el lunes y cuando volví el miercoles allí estaba él. Se había adueñado de mi porche. Así que el jueves lo llevé al veterinario y resulta que tenía chip. Los dueños viven a 200 metros de mi casa, por lo que dejé al michito en el veterinario y me fuí. El gato es realmente bueno, le encantan los mimos y está deseando que lo coja para acariciarlo.
Sin embargo tardó una semana en volver a mi porche. A mí no me importaba que estuviese allí, pero me daba cosa que estuviese todo el día fuera de casa. Me acerqué a la dueña y le dije que no me importaba pero que no le pondría de comer, así que se fijase si volvía a casa para comer. Pasaron dos días y el gato por el día no se movía y por la noche se iba a un campo que hay cruzando la calle. Así que me dió pena y como me pedía comida al final le puse. Pero así no podía quedarse, por lo que le dije a la dueña que nos ibamos de viaje y que iba a llover, por lo que se pasó a recoger al gato. Tardó 24 horas en volver.
Esto pasó hace diez días y se con certeza que no va a su casa a comer ya que le doy yo. Y la dueña ni ha preguntado.
Es un gatito común de un año y tres meses. Castrado. Como ya he dicho es muyyyy bueno, es decir, es un mimoso. Si me siento en la silla del porche o en las escaleras inmediatamente se viene a mi regazo para que le acarice. Ya ha asociado el ruido de llaves conmigo, así que si me acerco al campo y muevo las llaves sale corriendo y se viene conmigo al porche de casa. Cuando salgo a tirar la basura me acompaña (unos 50 metros).
El viernes pasado nos fuimos mi novia y yo a dar un paseo y con ayuda de las llaves nos siguió todo el camino. Nos paramos en la puerta de su casa y se sentó. Intentamos darle esquinazo para que se quedase allí pero no hubo forma se venía con nosotros cual perro. En esta ocasión hizo un gesto que nos extrañó mucho, cuando salimos de casa y nos alejabamos salió corriendo y saltó sobre un arbol justo tras nosotros y se agarró cual mono al tronco. Esto mismo lo volvió a hacer cuando le intentamos dar esquinazo en su casa y me lo hizo ayer cuando salí a comprarle comida. ¿si le corto las uñas los muebles se arañan? ¿Puede un gato que lleva dos meses disfrutando de la libertad de hacer lo que quiera y que todas las noches se va de picos pardos al campo vivir tranquilamente en una casa?
No se qué hacer, pero nos da pena porque es muy bueno y mimoso.
¿qué opinais?
Gracias y saludos!!!
PD: disculpad por haber escrito el Quijote tercera parte, pero quería contaros con detalle la situación. Aún así me he dejado cosas por contar...
Quiero contaros la historia de un gato que apareció por mi casa hace unos meses para que me deis consejos y me orienteis si lo considerais oportuno. Quizás se haga un poco larga la explicación, pido perdón por anticipado, pero ya nos conocemos hace un par de meses y hay varias aventuras qué contar y dudas que me surgen a cada momento.
Vivo en una calle privada peatonal cuando una noche veo a un gato con correa en mitad de la calle, le grito,"eh! tú, dónde vas?? Y en lugar de asustarse se vino para mí y se puso a rozarse con mis piernas. ¿se habrá escapado? ¿lo habrán abandonado? Por si acaso le pusimos agua en el porche y nos fuimos a dormir. Durante los dos días siguientes (sabado y domingo) estuvo rondando por la calle, por lo que mi intención era llevarlo el lunes al veterinario para ver si tenía chip y si no al menos me aconsejase qué hacer con el gato. Pero por motivos laborales tuve que salir de viaje toda la semana. A la vuelta el gato ya no estaba, por lo que nos olvidamos del mismo.
A las dos semanas volvió a aparecer por el barrio, pero esta vez se aposentó en mi porche. También coincidio con fin de semana por lo que le dimos de comer y agua. Volví a salir de viaje el lunes y cuando volví el miercoles allí estaba él. Se había adueñado de mi porche. Así que el jueves lo llevé al veterinario y resulta que tenía chip. Los dueños viven a 200 metros de mi casa, por lo que dejé al michito en el veterinario y me fuí. El gato es realmente bueno, le encantan los mimos y está deseando que lo coja para acariciarlo.
Sin embargo tardó una semana en volver a mi porche. A mí no me importaba que estuviese allí, pero me daba cosa que estuviese todo el día fuera de casa. Me acerqué a la dueña y le dije que no me importaba pero que no le pondría de comer, así que se fijase si volvía a casa para comer. Pasaron dos días y el gato por el día no se movía y por la noche se iba a un campo que hay cruzando la calle. Así que me dió pena y como me pedía comida al final le puse. Pero así no podía quedarse, por lo que le dije a la dueña que nos ibamos de viaje y que iba a llover, por lo que se pasó a recoger al gato. Tardó 24 horas en volver.
Esto pasó hace diez días y se con certeza que no va a su casa a comer ya que le doy yo. Y la dueña ni ha preguntado.
Es un gatito común de un año y tres meses. Castrado. Como ya he dicho es muyyyy bueno, es decir, es un mimoso. Si me siento en la silla del porche o en las escaleras inmediatamente se viene a mi regazo para que le acarice. Ya ha asociado el ruido de llaves conmigo, así que si me acerco al campo y muevo las llaves sale corriendo y se viene conmigo al porche de casa. Cuando salgo a tirar la basura me acompaña (unos 50 metros).
El viernes pasado nos fuimos mi novia y yo a dar un paseo y con ayuda de las llaves nos siguió todo el camino. Nos paramos en la puerta de su casa y se sentó. Intentamos darle esquinazo para que se quedase allí pero no hubo forma se venía con nosotros cual perro. En esta ocasión hizo un gesto que nos extrañó mucho, cuando salimos de casa y nos alejabamos salió corriendo y saltó sobre un arbol justo tras nosotros y se agarró cual mono al tronco. Esto mismo lo volvió a hacer cuando le intentamos dar esquinazo en su casa y me lo hizo ayer cuando salí a comprarle comida. ¿si le corto las uñas los muebles se arañan? ¿Puede un gato que lleva dos meses disfrutando de la libertad de hacer lo que quiera y que todas las noches se va de picos pardos al campo vivir tranquilamente en una casa?
No se qué hacer, pero nos da pena porque es muy bueno y mimoso.
¿qué opinais?
Gracias y saludos!!!
PD: disculpad por haber escrito el Quijote tercera parte, pero quería contaros con detalle la situación. Aún así me he dejado cosas por contar...