Si hablamos de esterilización, a todos nos viene la mente la extirpación de testículos y ovarios. Quizás algunos ni tan siquiera, sobretodo en hembras, saben muy bien de lo que se trata.
La castración es la extirpación de las glándulas gónadas, uno de los órganos que forman el sistema endocrino y que se encargan de sintetizar hormonas (estrógenos y andrógenos) necesarias para el desarrollo de los órganos reproductores y también de las características sexuales secundarias.
En mamíferos el sistema endocrino lo conforman los mismos órganos y las mismas funciones reguladoras y es sencillamente perfecto.
En humanos que optan por una esterilización definitiva se practica la vasectomía en varones, y la ligadura de trompas o histerectomía en mujeres. Son intervenciones quirúrgicas que respetan ovarios y testículos y que sólo actúan impidiendo la fecundación, sin afectar al sistema endocrino y por lo tanto a la sexualidad, carácter e identidad del individuo.
Estas intervenciones también se realizan en otros mamíferos como perros y gatos aunque, lamentablemente suelen ser desaconsejadas por muchos veterinarios, quienes nos darán un sinfín de ventajas unidas a la castración siempre desde un punto de vista físico-patólogico, conductual y.. especista, sin tener en cuenta al ser como individuo completo.
Si buscamos un poco, normalmente sólo encontraremos ventajas atribuibles a la castración. También se deberían mencionar aspectos negativos de la misma, veamos un balance de ambas a nivel físico:
El número de problemas de salud asociados con la castración en muchos casos superan a los beneficios.
MACHOS:
Haciendo balance, aparentemente no parece que en temas de salud compense esterilizar a los machos para prevenir futuros problemas de salud, especialmente si se realiza antes de alcanzar la madurez. El número de problemas de salud asociados con la castración en muchos casos superan a los beneficios.
Puntos positivos:
Elimina el riesgo de muerte por cáncer testicular (la probabilidad es menor del 1%)
Reduce el riesgo de desórdenes prostáticos no cancerosos
Reduce el riesgo de fístulas perianales
Podría reducir el riesgo de diabetes (datos no concluyentes)
Puntos negativos:
Si la operación se realiza antes de alcanzar la madurez, se incrementa el riesgo de osteosarcoma por un factor de 3,8; este es un cáncer común en razas medianas y grandes con un mal pronóstico.
Incrementa el riesgo de hemangiosarcoma por un factor de 1,6; este es un cáncer común y la mayor causa de muerte en algunas razas.
Triplica el riesgo de hipotiroidismo.
Incrementa el riesgo de desórdenes cognitivos geriátricos (alzheimer canino).
Triplica el riesgo de obesidad, un problema muy común en perros, Aumenta el riesgo de reacciones adversas a la vacunación.
asociado con numerosos problemas de salud.
Cuadriplica el riesgo de cáncer de próstata (este es menor del 0.6%).
Dobla el riesgo de cáncer en el tracto urinario (es menor del 1%).
Incrementa el riesgo de problemas articulares.
EN HEMBRAS:
Puntos positivos:
Si se realiza antes de los 2,5 años de edad, reduce enormemente el riesgo de tumores mamarios malignos, los mas comunes en perras. Elimina el riesgo de piómetra, que afecta al 23% de hembras enteras y mata alrededor del 1%.
Reduce el riesgo de fístulas perianales.
Elimina el riesgo (muy pequeño, < 0,5%) de tumores de útero, cérvix y ovarios.
Puntos negativos:
Si se realiza antes de la madurez, incrementa el riesgo de osteosarcoma en un 3,2%, común en razas medianas y grandes con mal pronóstico.
Aumenta el riesgo de hemagiosarcoma esplénico en un 2,2% y hemangiosarcoma cardiaco en más del 5%. Es un cáncer común y la principal causa de muerte en algunas razas.
Triplica el riesgo de hipotiroidismo.
Aumenta el riesgo de obesidad con un factor de 1,6-2 , un problema muy común en perros, asociado con numerosos problemas de salud.
Causa incontinencia urinaria en un 4-20% de las hembras.
Aumenta el riesgo de infecciones del tracto urinario en un factor del
3-4.
Aumenta el riesgo de invaginación vulvar, vaginitis y dermatitis vaginal, especialmente en hembras esterilizadas antes de la pubertad.
Dobla el riesgo (< 1%) de tumores en el tracto urinario.
Incrementa el riesgo de problemas articulares.
Aumenta el riesgo de reacciones adversas a la vacunación.
Y en ambos sexos, hay un incremento considerable de displaxia y otras patologías relacionadas con el hueso y las articulaciones.
Fuente: http://www2.dcn.org/orgs/ddtc/sfiles/LongT...erInDogs.pdf%20
Fuente: http://www.voraus.com/adiestramientocanino...p?articleid=553
Enrique César Lerena de la Serna es Dr. En Etología, citado por el premio Nobel Konrad Lorenz, autor de más de 2.500 notas y ensayos acerca de diversas especies animales, publicados en revistas y periódicos de todo el mundo.
Entrevistado:
¿Qué opinión le merece las castraciones de perros y gatos?
La castración es el medio más draconiano y vejatorio de quitar las capacidades psicofísicas al animal, convirtiéndolo en un ser blando y anodino. Se trata de un método que amputa no sólo los genitales sino también, en nombre de la salud y la higiene, procede a la regulación de los instintos. No es posible defender las castraciones y, simultáneamente, adherir una posición naturalista.
El premio Nóbel Konrad Lorenz decía: ‘que la gente castre a sus mascotas y además excuse el hecho en razones científicas demuestra el grado de perversión y cinismo. No sólo es un cultura depravada, sino científicamente depravada’.
La mayoría de los veterinarios adhieren a esta práctica, ¿Cuál es el motivo?
Algunos por rédito y otros por ignorancia. Los castradores desconocen la función del vomeronasal y que, naturalmente, luego de la cirugía de testículos u ovarios, sigue recibiendo las feromonas, los reclamos sexuales, hasta el fin de los días. Ese órgano –descubierto hace 300 años- al parecer no figura en los apuntes de la facultad que les dio licencia para ser tan cortantes y tan rudos. Los castradores ignoran que los perros sueñan; que ni la oniria ni los instintos se destruyen con el bisturí. Al elegir el eufemismo de "esterilización" para no llamar al dolor por su nombre, parecen desconocer que el idioma los acusa allí donde se esconden: Esterilizar viene del Gr. stéreoo, privar, y ésta, de la palabra stygós, ‘odio, inquina grave’. Muchos veterinarios castradores, incoherentemente, se oponen a la otectomía y a la caudectomía (corte de orejas y de cola) porque ‘no adhieren a la mutilación’
¿Cuáles son las consecuencias perjudiciales de la castración?
Las patologías somáticas y conductales del castrado llenan un libro y vacían a un ser. Las observaciones de etólogos y científicos como Leyhausen, Berardi, Silver, Nudermann, entre otros, no admiten dudas. Los síntomas abundan: se comprobó alopecia, peladuras endocrinas en relieves epidérmicos, quelonios en el extremo de la cola y muslos, seborreas, descamaciones y opacidad capilar.
En caninos y felinos machos se ha observado hemorragias urinarias. En hembras castradas hubo hematurias con la proximidad de hembras enteras.
Frecuentemente los perros y gatos castrados incurren en el ‘Idiotismo de Bechterev’, conducta incurable, que se caracteriza por el intento de orinar o defecar para obtener algún sustituto del placer sexual.
Perros y gatos castrados son sorprendidos en actitudes maternales, además de incrementarse las estereotipias al nivel de la demencia trágica e imbecil.
En todos los mamíferos, las hembras resultan más afectadas por la castración que los machos, tanto en fobias, neurosis y estereotipias.
Zuckermann describe suicidios de gatos y perros machos castrados arrojándose al vacío desde las alturas.
¿Sin castraciones, cómo evitar el abandono de animales y la superpoblación?
El tema es serio y no para tomar a la ligera, pero las castraciones comportan un anacronismo, pues se hallan alternativas que no producen los incuestionables trastornos surgidos con la castración.
Existen traslativos de celo, desodorizantes y anaferomónicos, pesarios y diafragmas, dispositivos intrauterinos (DIUC) y abortivos. Además de métodos quirúrgicos que no alteran la psiquis, como la ligadura de trompas, histerectomía y la vasectomía.
Fuente http://www.canamigo.com.ar/modules.php?nam...e&artid=108
La castración está tan extendida, que a veces da la impresión de que lo normal en un gato o un perro es estár castrado. Los demás animales nacen al igual que nosotros con un organismo complejo y maravilloso. Cada célula, órgano, sistema está donde tiene que estár. La naturaleza nos ha creado sabiamente y nuestros organismos son máquinas perfectas en las que, en un estado de salud, todo funciona de forma armoniosa y organizada.
Nuestra sexualidad, nuestra identidad como macho o hembra queda anulada si nos estirpan nuestras glándulas sexuales.
A la hora de esterilizar a un ser, lo que queremos y debemos es impedir que pueda procrear. Para esto, por el mismo precio, e idéntico riesgo que una intervención castrativa, tenemos la alternativa de la vasectomía ( machos) e histerectomía ( hembras ).
La vasectomía consiste en cortar los conductos deferentes, por los cuales pasa el semen del testículo al pene. La histerectomía es la estirpación del útero, más recomendable que la ligadura de trompas ya que previene tumores.
Su coste es similar al de una castración y no veremos modificada su conducta, ya que seguirá conservando sus órganos endocrinos. Podrá mantener relaciones sexuales con sus congéneres y mantendrá intactos todos y cada uno de sus instintos naturales e identidad.
¿ por qué está tan extendida la castración ? Porque a parte de esterilizar, también se supone que modifica conductas ‘indeseables’ en el hogar en especial en gatos. Los machos ya no marcarán con orina, las hembras no molestaran con los celos, (esto no siempre es así ni mucho menos), y en general, se volverán más tranquilos y manejables. Tambien por conductas agresivas se recurre a la castración.
Para el marcaje en gatos machos, incluso la agresividad, hay otras soluciones como algunos sprays inofensivos que contienen feromonas, como Feliway spray.
Para aliviar los celos en las hembras también existen métodos naturales sin ningún tipo de contraindicación, como proporcionarle un compañero. Tambien existen remedios para los celos menos ortodoxos, como introducir un bastoncillo de los oídos en la vagina de la gata. De este modo provocamos la ovulación y cesará el estrés.
Para problemas de agresividad en perros, si realmente existe un conflicto, antes de castrar se deben barajar otras opciones como el adiestramiento. En casos de hacinamiento en perreras se debería valorar el número de animales por jaula, e intentar evitarlo, de cara a que ese perro o gato podrá salir de allí con suerte adoptado. En caso de animales mas difíciles de salir será el menor de los males.
Konrad Lorenz, el etólogo austríaco, el gran sabio del siglo pasado que en 1973 obtuvo el premio Nobel de medicina, dijo:
‘que la gente castre a sus mascotas y además excuse el hecho en razones científicas demuestra el grado de perversión y cinismo. No sólo es un cultura depravada, sino científicamente depravada’.
La castración es la extirpación de las glándulas gónadas, uno de los órganos que forman el sistema endocrino y que se encargan de sintetizar hormonas (estrógenos y andrógenos) necesarias para el desarrollo de los órganos reproductores y también de las características sexuales secundarias.
En mamíferos el sistema endocrino lo conforman los mismos órganos y las mismas funciones reguladoras y es sencillamente perfecto.
En humanos que optan por una esterilización definitiva se practica la vasectomía en varones, y la ligadura de trompas o histerectomía en mujeres. Son intervenciones quirúrgicas que respetan ovarios y testículos y que sólo actúan impidiendo la fecundación, sin afectar al sistema endocrino y por lo tanto a la sexualidad, carácter e identidad del individuo.
Estas intervenciones también se realizan en otros mamíferos como perros y gatos aunque, lamentablemente suelen ser desaconsejadas por muchos veterinarios, quienes nos darán un sinfín de ventajas unidas a la castración siempre desde un punto de vista físico-patólogico, conductual y.. especista, sin tener en cuenta al ser como individuo completo.
Si buscamos un poco, normalmente sólo encontraremos ventajas atribuibles a la castración. También se deberían mencionar aspectos negativos de la misma, veamos un balance de ambas a nivel físico:
El número de problemas de salud asociados con la castración en muchos casos superan a los beneficios.
MACHOS:
Haciendo balance, aparentemente no parece que en temas de salud compense esterilizar a los machos para prevenir futuros problemas de salud, especialmente si se realiza antes de alcanzar la madurez. El número de problemas de salud asociados con la castración en muchos casos superan a los beneficios.
Puntos positivos:
Elimina el riesgo de muerte por cáncer testicular (la probabilidad es menor del 1%)
Reduce el riesgo de desórdenes prostáticos no cancerosos
Reduce el riesgo de fístulas perianales
Podría reducir el riesgo de diabetes (datos no concluyentes)
Puntos negativos:
Si la operación se realiza antes de alcanzar la madurez, se incrementa el riesgo de osteosarcoma por un factor de 3,8; este es un cáncer común en razas medianas y grandes con un mal pronóstico.
Incrementa el riesgo de hemangiosarcoma por un factor de 1,6; este es un cáncer común y la mayor causa de muerte en algunas razas.
Triplica el riesgo de hipotiroidismo.
Incrementa el riesgo de desórdenes cognitivos geriátricos (alzheimer canino).
Triplica el riesgo de obesidad, un problema muy común en perros, Aumenta el riesgo de reacciones adversas a la vacunación.
asociado con numerosos problemas de salud.
Cuadriplica el riesgo de cáncer de próstata (este es menor del 0.6%).
Dobla el riesgo de cáncer en el tracto urinario (es menor del 1%).
Incrementa el riesgo de problemas articulares.
EN HEMBRAS:
Puntos positivos:
Si se realiza antes de los 2,5 años de edad, reduce enormemente el riesgo de tumores mamarios malignos, los mas comunes en perras. Elimina el riesgo de piómetra, que afecta al 23% de hembras enteras y mata alrededor del 1%.
Reduce el riesgo de fístulas perianales.
Elimina el riesgo (muy pequeño, < 0,5%) de tumores de útero, cérvix y ovarios.
Puntos negativos:
Si se realiza antes de la madurez, incrementa el riesgo de osteosarcoma en un 3,2%, común en razas medianas y grandes con mal pronóstico.
Aumenta el riesgo de hemagiosarcoma esplénico en un 2,2% y hemangiosarcoma cardiaco en más del 5%. Es un cáncer común y la principal causa de muerte en algunas razas.
Triplica el riesgo de hipotiroidismo.
Aumenta el riesgo de obesidad con un factor de 1,6-2 , un problema muy común en perros, asociado con numerosos problemas de salud.
Causa incontinencia urinaria en un 4-20% de las hembras.
Aumenta el riesgo de infecciones del tracto urinario en un factor del
3-4.
Aumenta el riesgo de invaginación vulvar, vaginitis y dermatitis vaginal, especialmente en hembras esterilizadas antes de la pubertad.
Dobla el riesgo (< 1%) de tumores en el tracto urinario.
Incrementa el riesgo de problemas articulares.
Aumenta el riesgo de reacciones adversas a la vacunación.
Y en ambos sexos, hay un incremento considerable de displaxia y otras patologías relacionadas con el hueso y las articulaciones.
Fuente: http://www2.dcn.org/orgs/ddtc/sfiles/LongT...erInDogs.pdf%20
Fuente: http://www.voraus.com/adiestramientocanino...p?articleid=553
Enrique César Lerena de la Serna es Dr. En Etología, citado por el premio Nobel Konrad Lorenz, autor de más de 2.500 notas y ensayos acerca de diversas especies animales, publicados en revistas y periódicos de todo el mundo.
Entrevistado:
¿Qué opinión le merece las castraciones de perros y gatos?
La castración es el medio más draconiano y vejatorio de quitar las capacidades psicofísicas al animal, convirtiéndolo en un ser blando y anodino. Se trata de un método que amputa no sólo los genitales sino también, en nombre de la salud y la higiene, procede a la regulación de los instintos. No es posible defender las castraciones y, simultáneamente, adherir una posición naturalista.
El premio Nóbel Konrad Lorenz decía: ‘que la gente castre a sus mascotas y además excuse el hecho en razones científicas demuestra el grado de perversión y cinismo. No sólo es un cultura depravada, sino científicamente depravada’.
La mayoría de los veterinarios adhieren a esta práctica, ¿Cuál es el motivo?
Algunos por rédito y otros por ignorancia. Los castradores desconocen la función del vomeronasal y que, naturalmente, luego de la cirugía de testículos u ovarios, sigue recibiendo las feromonas, los reclamos sexuales, hasta el fin de los días. Ese órgano –descubierto hace 300 años- al parecer no figura en los apuntes de la facultad que les dio licencia para ser tan cortantes y tan rudos. Los castradores ignoran que los perros sueñan; que ni la oniria ni los instintos se destruyen con el bisturí. Al elegir el eufemismo de "esterilización" para no llamar al dolor por su nombre, parecen desconocer que el idioma los acusa allí donde se esconden: Esterilizar viene del Gr. stéreoo, privar, y ésta, de la palabra stygós, ‘odio, inquina grave’. Muchos veterinarios castradores, incoherentemente, se oponen a la otectomía y a la caudectomía (corte de orejas y de cola) porque ‘no adhieren a la mutilación’
¿Cuáles son las consecuencias perjudiciales de la castración?
Las patologías somáticas y conductales del castrado llenan un libro y vacían a un ser. Las observaciones de etólogos y científicos como Leyhausen, Berardi, Silver, Nudermann, entre otros, no admiten dudas. Los síntomas abundan: se comprobó alopecia, peladuras endocrinas en relieves epidérmicos, quelonios en el extremo de la cola y muslos, seborreas, descamaciones y opacidad capilar.
En caninos y felinos machos se ha observado hemorragias urinarias. En hembras castradas hubo hematurias con la proximidad de hembras enteras.
Frecuentemente los perros y gatos castrados incurren en el ‘Idiotismo de Bechterev’, conducta incurable, que se caracteriza por el intento de orinar o defecar para obtener algún sustituto del placer sexual.
Perros y gatos castrados son sorprendidos en actitudes maternales, además de incrementarse las estereotipias al nivel de la demencia trágica e imbecil.
En todos los mamíferos, las hembras resultan más afectadas por la castración que los machos, tanto en fobias, neurosis y estereotipias.
Zuckermann describe suicidios de gatos y perros machos castrados arrojándose al vacío desde las alturas.
¿Sin castraciones, cómo evitar el abandono de animales y la superpoblación?
El tema es serio y no para tomar a la ligera, pero las castraciones comportan un anacronismo, pues se hallan alternativas que no producen los incuestionables trastornos surgidos con la castración.
Existen traslativos de celo, desodorizantes y anaferomónicos, pesarios y diafragmas, dispositivos intrauterinos (DIUC) y abortivos. Además de métodos quirúrgicos que no alteran la psiquis, como la ligadura de trompas, histerectomía y la vasectomía.
Fuente http://www.canamigo.com.ar/modules.php?nam...e&artid=108
La castración está tan extendida, que a veces da la impresión de que lo normal en un gato o un perro es estár castrado. Los demás animales nacen al igual que nosotros con un organismo complejo y maravilloso. Cada célula, órgano, sistema está donde tiene que estár. La naturaleza nos ha creado sabiamente y nuestros organismos son máquinas perfectas en las que, en un estado de salud, todo funciona de forma armoniosa y organizada.
Nuestra sexualidad, nuestra identidad como macho o hembra queda anulada si nos estirpan nuestras glándulas sexuales.
A la hora de esterilizar a un ser, lo que queremos y debemos es impedir que pueda procrear. Para esto, por el mismo precio, e idéntico riesgo que una intervención castrativa, tenemos la alternativa de la vasectomía ( machos) e histerectomía ( hembras ).
La vasectomía consiste en cortar los conductos deferentes, por los cuales pasa el semen del testículo al pene. La histerectomía es la estirpación del útero, más recomendable que la ligadura de trompas ya que previene tumores.
Su coste es similar al de una castración y no veremos modificada su conducta, ya que seguirá conservando sus órganos endocrinos. Podrá mantener relaciones sexuales con sus congéneres y mantendrá intactos todos y cada uno de sus instintos naturales e identidad.
¿ por qué está tan extendida la castración ? Porque a parte de esterilizar, también se supone que modifica conductas ‘indeseables’ en el hogar en especial en gatos. Los machos ya no marcarán con orina, las hembras no molestaran con los celos, (esto no siempre es así ni mucho menos), y en general, se volverán más tranquilos y manejables. Tambien por conductas agresivas se recurre a la castración.
Para el marcaje en gatos machos, incluso la agresividad, hay otras soluciones como algunos sprays inofensivos que contienen feromonas, como Feliway spray.
Para aliviar los celos en las hembras también existen métodos naturales sin ningún tipo de contraindicación, como proporcionarle un compañero. Tambien existen remedios para los celos menos ortodoxos, como introducir un bastoncillo de los oídos en la vagina de la gata. De este modo provocamos la ovulación y cesará el estrés.
Para problemas de agresividad en perros, si realmente existe un conflicto, antes de castrar se deben barajar otras opciones como el adiestramiento. En casos de hacinamiento en perreras se debería valorar el número de animales por jaula, e intentar evitarlo, de cara a que ese perro o gato podrá salir de allí con suerte adoptado. En caso de animales mas difíciles de salir será el menor de los males.
Konrad Lorenz, el etólogo austríaco, el gran sabio del siglo pasado que en 1973 obtuvo el premio Nobel de medicina, dijo:
‘que la gente castre a sus mascotas y además excuse el hecho en razones científicas demuestra el grado de perversión y cinismo. No sólo es un cultura depravada, sino científicamente depravada’.