Hematuria Y CastraciÓn

PEQUESSAU

Usuario
Hola a todos.
Tengo un maine coon de dos años y necesito una segunda opinión porque está un poquitín pachucho y no se que hacer.

Hace unas semanas le realicé un análisis de orina por primera vez y dió hematuria y proteinuria, el veterinario me mandó clamoxyl y a los diez días le repetimos el análisis; en este segundo, no había sangre pero si proteinas, aunque en menor nivel que el anterior.
A la semana le realizamos una punción para comprobar que la orina estaba ya correcta, pero volvió a dar hematuria y proteinuria sin embargo el cultivo era estéril.
Para descartar problemas de riñon, le hicimos análisis de sangre y en principio todo está correcto (Tenía creatinina 1,4 mg/dl, aunque en el último análisis de junio del año pasado el valor de creatinina era de 1 mg/dl) También le hemos hecho una ecografía y todo está bien.
Mi veterinaria cree que la causa es que no está castrado y la excitación sexual es lo que le provoca esos niveles de sangre y proteinas, además de muchas celúlas en la orina.
¿Esto es posible?
El consejo de mi veterinaria es que lo castre, sin embargo me da un poco de reparo ya que el año pasado le tuvimos que anestesiar en dos ocasiones. ¿Es seguro hacerlo una tercera vez?

Además, por si fuera poco, mi gato tiene problemas en las patas traseras. Le suena un chasquido fundamentalmente al saltar, algunas veces también al correr. Al palparle la veterinaria me dijo que cree que tiene algo de cadera y se le saltan las rótulas de las patas traseras. Me mando Hills J/D y Cosequin Taste. Llevo dandoselo un mes y medio y aunque el chasquido sigue sonando parece que se cae con menos frecuencia. La veterinaria dice que hay que hacer placa para saber exactamente lo que tiene y plantearnos operarle. En casa estamos seguros de no operarle ya que es un gato muy delicadito, se extresa mucho y con el postoperatorio del año pasado lo paso fatal. ¿Creeis que merece la pena dormirle para hacerle la radiografia si no tenemos pensado operarle?

Necesito un consejo urgente!!! Gracias a todos.
 

Triskel

Usuario Activo
<div class='quotetop'>CITA(PEQUESSAU @ Mar 11 2009, 01:17 PM) <{POST_SNAPBACK}></div>
Hola a todos.
Tengo un maine coon de dos años y necesito una segunda opinión porque está un poquitín pachucho y no se que hacer.

Hace unas semanas le realicé un análisis de orina por primera vez y dió hematuria y proteinuria, el veterinario me mandó clamoxyl y a los diez días le repetimos el análisis; en este segundo, no había sangre pero si proteinas, aunque en menor nivel que el anterior.
A la semana le realizamos una punción para comprobar que la orina estaba ya correcta, pero volvió a dar hematuria y proteinuria sin embargo el cultivo era estéril.
Para descartar problemas de riñon, le hicimos análisis de sangre y en principio todo está correcto (Tenía creatinina 1,4 mg/dl, aunque en el último análisis de junio del año pasado el valor de creatinina era de 1 mg/dl) También le hemos hecho una ecografía y todo está bien.
Mi veterinaria cree que la causa es que no está castrado y la excitación sexual es lo que le provoca esos niveles de sangre y proteinas, además de muchas celúlas en la orina.
¿Esto es posible?
El consejo de mi veterinaria es que lo castre, sin embargo me da un poco de reparo ya que el año pasado le tuvimos que anestesiar en dos ocasiones. ¿Es seguro hacerlo una tercera vez?

Además, por si fuera poco, mi gato tiene problemas en las patas traseras. Le suena un chasquido fundamentalmente al saltar, algunas veces también al correr. Al palparle la veterinaria me dijo que cree que tiene algo de cadera y se le saltan las rótulas de las patas traseras. Me mando Hills J/D y Cosequin Taste. Llevo dandoselo un mes y medio y aunque el chasquido sigue sonando parece que se cae con menos frecuencia. La veterinaria dice que hay que hacer placa para saber exactamente lo que tiene y plantearnos operarle. En casa estamos seguros de no operarle ya que es un gato muy delicadito, se extresa mucho y con el postoperatorio del año pasado lo paso fatal. ¿Creeis que merece la pena dormirle para hacerle la radiografia si no tenemos pensado operarle?

Necesito un consejo urgente!!! Gracias a todos.[/b]

¿No operarle?
No lo entiendo muy bien.
Si el gato tiene problemas en la cadera hay que hacer diagnostico ya, y si es necesario operarle. Si , por desgracia, la operacion en la cadera es necesaria podeis aprovechar y esterilizarlo y así solo pasa por una operacion.
El tema de la cadera en los Maine Coon es muy importante, conozco mas de un caso de gatos con displasia, todos de la misma raza. Por favor, no lo dejes pasar y revisarle ese problema cuanto antes.

PD: ¿Necesitan anestesiarlo para hacerle una radiografía?
 

TULI

Experto
Hola PEQUESSAU bienvenid@ al super foro :D

Yo la llevaria a otro veterinario pero que sea experto de gatos !!!

Y creo que no tiene nada que ver es porque NO ESTÁ CASTRADO ...

Aqui tienes una buena informacion sobre ese problema:

( es copiado de un artículo escrito por un equipo de veterinarios expertos de gatos )

ENFERMEDADES DE VÍAS URINARIAS BAJAS EN EL GATO:

El sistema urinario está formado por los riñones, que filtran la sangre y excretan la orina, los uréteres que conducen la orina desde la pelvis renal hasta la vejiga de la orina, en donde queda almacenada hasta el momento de la micción.

Una estructura anatómica sumamente importante para entender los problemas que vamos a describir en el presente artículo es la uretra.
La uretra del gato empieza en el cuello de la vejiga y termina en el glande, mientras que en la gata, comienza en el cuello de la vejiga y termina en el vestíbulo vaginal.

Cuando yo empecé a trabajar como clínico veterinario, hace ya 26 años, el término SUF (Síndrome Urológico Felino) o FUS (Feline Urologic Syndrome), era el que utilizábamos para englobar todas las enfermedades que se concretaban sobre las vías urinarias bajas de los gatos. Estos nombres han quedado en desuso y actualmente, aunque con reticencias, se utiliza el término FLUTD (Feline Lower Urinary Tract Disease) o el término SLUTD (enfermedad del tracto urinario bajo del gato)

De cualquier forma lo que debe quedar claro es que, bajo este concepto quedan incluidos una amplia variedad de signos de las vías urinarias bajas del gato que pueden ser producidos por muy distintas causas. Existen más de 40 posibles causas de signos urinarios de las vías bajas del gato. El primer reto clínico con el que nos enfrentamos los veterinarios es por tanto el de establecer la causa de estos síntomas o signos que serán los que nos van decir que el gato está enfermo.

Las etiologías o causas que nos vamos a encontrar más a menudo son:

-Procesos idiopáticos (más de la mitad de los casos)
-Urolitiasis (formación de cálculos en vías urinarias)
-Tapones uretrales (formaciones que se pueden encontrar en la uretra felina, constituidas por una sustancia amorfa a la que se agregan mayor o menor cantidad de minerales en forma cristalina). En un 16% de los casos, estos tapones no contienen minerales.
-Infecciones urinarias, aunque no debemos olvidar que en muchas ocasiones puede darse una etiología mixta (urololitiasis con infección)

De cualquier forma hay una serie de signos previos que pueden fácilmente pasar desapercibidos como son:

-Lamido insistente o más frecuente de la zona perineal.
-Viajes más frecuentes a la caja, aunque se produzca una micción aparentemente normal.
-Presencia de micciones fuera de la caja, aunque sean de aspecto normal.
-Búsqueda de lugares de estancia poco habituales.
-Cambios de carácter.
-Señales de intolerancia a las caricias en la tripa.
-Ligera tendencia a la protusión peneana.

Ante un gato con alguno de estos signos deberíamos realizar los análisis necesarios para poder llegar a un diagnóstico. El problema es que casi nunca habréis sido lo suficientemente observadores como para daros cuenta de ellos, y acudiréis al veterinario cuando los signos mencionados han pasado a ser síntomas más que evidentes de que algo no marcha bien.
Así nos encontraremos en la mayoría de las ocasiones con gatos que presentan un historial claro de disuria (emisión dolorosa o difícil de la orina) y polaquiuria (emisión anormalmente frecuente de orina), con palpación dolorosa de una vejiga bastante llena. La mayoría de estos gatos suelen presentar hematuria (sangre en la orina). Estos gatos normalmente ya han perdido algo de su apetito habitual, han disminuido su actividad, y han presentado algún vómito.

En otras ocasiones nos encontraremos con gatos obstruidos, que son incapaces de orinar, y que presentarán falta de acicalamiento, decaimiento y deshidratación. Estos gatos requerirán atención urgente, ya que normalmente son animales con anorexia, debilidad, depresión, vómitos, dolor abdominal, deshidratación e hipotermia. Además, debido al reflujo de orina a los riñones, se podrán presentar complicaciones renales como azotemia acidosis (aumento de urea en sangre), hipercaliemia (aumento de potasio en sangre) e hiperfosfatemia (aumento de fósforo en sangre).

Ante un gato obstruido y una vez solucionada la obstrucción y estabilizado, tendremos que preocuparnos de saber la composición de los cristales que han sido capaces de formar los cálculos que han provocado el problema. Para ello es indispensable la realización de un análisis de la orina, previa centrifugación, aunque realmente la identificación definitiva sólo es posible mediante análisis por métodos físicos.

Los cristales más frecuentes en el gato son los de estruvita (fosfato amónico magnésico), que se forman en orinas con un pH superior a 6,5. Los cristales de oxalato cálcico se forman en pH neutros, ácidos, o alcalinos, aunque lo más frecuente es que aparezcan en pH ácidos, es decir en aquellos inferiores a 6. Los clínicos veterinarios estamos asistiendo en los últimos años a un aumento de este tipo de cálculos, quizás debido a la inclusión en muchos piensos de sustancias acidificantes de la orina para evitar la formación de aquellos cálculos que se forman en pH alcalino, es decir los de estruvita. Quiero decir con esto que, quizás estemos previniendo la aparición de unos y fomentando la aparición de otros. Creo que los nutrólogos deberían empezar a preocuparse de esta cuestión a la hora de formular los piensos que estamos utilizando en nuestros gatos. Esto que comento, es tan sólo una apreciación personal, que es negada con contundencia por muchos veterinarios. Lo que si es cierto, es que la incidencia de este síndrome, por lo menos en nuestra clínica, está claramente en descenso en los últimos años, merced sin duda a la mejora nutricional que se ha producido en nuestros gatos.

Otros tipos de cálculos que nos podemos encontrar en las uretras y vejigas de nuestros gatos son los de urato amónico, fosfato cálcico, y cistina.

Lo cierto es, cómo he comentado anteriormente, que los signos clínicos como la eliminación de orina en sitios inadecuados, presencia de hematuria, disuria, y polaquiuria, no implican siempre obstrucción uretral, ya sea total o parcial, por urolitos o por tapones uretrales. Salvo en el caso de los gatos obstruidos, será bastante complicado establecer la causa de los signos y síntomas que presentan los afectados por SLUTD. Es por esto que como habéis leído más de la mitad de los casos son considerados como idiopáticos, es decir de causa desconocida.

Los procedimientos de desobstrucción de un gato que es incapaz de orinar, comprenden la sedación e incluso la anestésia general para introducir la sonda en el conducto uretral peneano. Dado que en muchas ocasiones el estado de estos gatos es bastante malo, se hará necesaria la rehidratación por vía intravenosa, y el uso de analgésicos y antibióticos. Si el gato lleva si orinar más de 24 horas, debemos contar con la posibilidad de que se produzca su muerte a pesar de los esfuerzos que todos los veterinarios ponemos para resolver este tipo de problemas, debido a que suelen presentar una insuficiencia renal posrenal u obstructiva. Además estos gatos suelen presentar alteraciones de la coagulación, y elevados niveles de potasio que pueden comprometer su vida. Muchos de estos animales sufrirán una insuficiencia renal crónica que provocará un fracaso renal irreversible.

Si mediante estas técnicas no conseguimos solucionar el problema habrá que realizar lo que se conoce como uretrostomía perineal, y que consiste básicamente en eliminar el estrechamiento de la porción peneana de la uretra. Está técnica quirúrgica implica la amputación del pene del gato, y la castración si es que el animal está entero. Sí además, hemos visualizado cálculos en la vejiga, se impondrá la eliminación quirúrgica de los mismos.

Una vez solucionado el problema puntual que supone la obstrucción en un gato, nos debemos preocupar de evitar las recaídas, tanto si hubo que realizar la uretrostomía como si no. Para ello, una vez identificados los minerales que han formado los cálculos que dieron lugar a la obstrucción, se impone normalmente un cambio radical en la alimentación.

Si los cálculos eran de estruvita deberemos utilizar acidificantes urinarios, ya que mantener el pH de la orina entre 6-6,5 es fundamental. Además, debemos conseguir el aumento del volumen urinario haciendo que el gato beba más. Para ello se deben utilizar principalmente las dietas secas o húmedas que muchos fabricantes de piensos tienen en el mercado y que cumplen perfectamente estos fines. Puedo afirmar, que en muchos casos, estas dietas son capaces por si mismas de disolver algunos de estos cálculos presentes en la vejiga.

Si los cálculos son de oxalato, existen también dietas adecuadas para evitar su recurrencia, aunque a diferencia de las dietas preparadas para la estruvita, no son capaces de disolverlos.

Recientemente se ha presentado en el mercado una dieta adecuada para ser ingerida por gatos que han presentado cálculos, independientemente del tipo de que se traten.

El control y tratamiento de los gatos con cistitis idiopática sigue siendo un reto clínico importante, ya que muchas veces los síntomas remiten de forma espontánea a los pocos días, pero vuelven a recurrir en muchos animales al cabo de pocos días o semanas. Son muchos los medicamentos utilizados en los gatos que presentan este problema como antibióticos, antiespasmódicos, corticoesteroides, antidepresivos, modificaciones dietéticas, acidificantes urinarios, y sueros por vía subcutánea, sin conseguir una respuesta positiva. El más utilizado en los últimos tiempos ha sido la amitriptilina, pero al igual que ha dado excelentes resultados en algunos gatos, en otros no ha sido así. Es un medicamento cuyas dosis son muy variables, y que por tanto deben ser ajustadas en cada animal, y cuyo uso requiere un control de las enzimas hepáticas.

Como siempre decimos, es mejor prevenir que curar, y más habiendo leído lo que os he contado en el artículo. Es por tanto de suma importancia que observéis la bandeja de vuestro gato, y que os familiaricéis con sus costumbres a la hora de la micción. Cualquier cambio que se presente en ellas, os puede estar avisando de que necesita con urgencia la visita al veterinario. No esperéis a que no orine, porque a veces puede ser demasiado tarde.

CUADRO: CAUSAS DE LA ENFERMEDAD DEL TRACTO URINARIO BAJO DEL GATO
-Alteraciones metabólicas: urolitos o tapones uretrales
-Enfermedades inflamatorias: -infecciosas: virus, bacterias, hongos.
-no infecciosas: inmunomediadas
-Traumatismo
-Desórdenes neurológicos (espasmo uretral, atonía de la vejiga)
-Causas iatrogénicas: catéter uretral, uretrostomía
-Anomálias anatómicas: divertículo vesicouracal
-Neoplasias: -benignas (fibroma, hemangioma)
-malignas (carcinoma de células de transición, adenocarcinoma, linfosarcoma)
 

PEQUESSAU

Usuario
Gracias TULI,
Supongo que tienes razón y debo llevarle a un vete experto en felinos.
La información que me mandas es interesante, pero el caso de Klin (mi gatito) no es exactamente ese: tiene sangre y proteinas en la orina (se aprecia microscopicamente) pero su Ph es normal, no hay cristales, y tampoco infección.
Escuché hablar de la cistitis idiotópica, y quizá sea eso lo que tenga Klin, el problema es que mi veterinaria dice que no podemos saber si es ese caso hasta que no descartemos el tema de la castración.
Yo no tengo problema en castrarle, pero me da miedo anestesiarle de nuevo.







<div class='quotetop'>CITA(TULI @ Mar 11 2009, 03:20 PM) <{POST_SNAPBACK}></div>
Hola PEQUESSAU bienvenid@ al super foro :D

Yo la llevaria a otro veterinario pero que sea experto de gatos !!!

Y creo que no tiene nada que ver es porque NO ESTÁ CASTRADO ...

Aqui tienes una buena informacion sobre ese problema:

( es copiado de un artículo escrito por un equipo de veterinarios expertos de gatos )

ENFERMEDADES DE VÍAS URINARIAS BAJAS EN EL GATO:

El sistema urinario está formado por los riñones, que filtran la sangre y excretan la orina, los uréteres que conducen la orina desde la pelvis renal hasta la vejiga de la orina, en donde queda almacenada hasta el momento de la micción.

Una estructura anatómica sumamente importante para entender los problemas que vamos a describir en el presente artículo es la uretra.
La uretra del gato empieza en el cuello de la vejiga y termina en el glande, mientras que en la gata, comienza en el cuello de la vejiga y termina en el vestíbulo vaginal.

Cuando yo empecé a trabajar como clínico veterinario, hace ya 26 años, el término SUF (Síndrome Urológico Felino) o FUS (Feline Urologic Syndrome), era el que utilizábamos para englobar todas las enfermedades que se concretaban sobre las vías urinarias bajas de los gatos. Estos nombres han quedado en desuso y actualmente, aunque con reticencias, se utiliza el término FLUTD (Feline Lower Urinary Tract Disease) o el término SLUTD (enfermedad del tracto urinario bajo del gato)

De cualquier forma lo que debe quedar claro es que, bajo este concepto quedan incluidos una amplia variedad de signos de las vías urinarias bajas del gato que pueden ser producidos por muy distintas causas. Existen más de 40 posibles causas de signos urinarios de las vías bajas del gato. El primer reto clínico con el que nos enfrentamos los veterinarios es por tanto el de establecer la causa de estos síntomas o signos que serán los que nos van decir que el gato está enfermo.

Las etiologías o causas que nos vamos a encontrar más a menudo son:

-Procesos idiopáticos (más de la mitad de los casos)
-Urolitiasis (formación de cálculos en vías urinarias)
-Tapones uretrales (formaciones que se pueden encontrar en la uretra felina, constituidas por una sustancia amorfa a la que se agregan mayor o menor cantidad de minerales en forma cristalina). En un 16% de los casos, estos tapones no contienen minerales.
-Infecciones urinarias, aunque no debemos olvidar que en muchas ocasiones puede darse una etiología mixta (urololitiasis con infección)

De cualquier forma hay una serie de signos previos que pueden fácilmente pasar desapercibidos como son:

-Lamido insistente o más frecuente de la zona perineal.
-Viajes más frecuentes a la caja, aunque se produzca una micción aparentemente normal.
-Presencia de micciones fuera de la caja, aunque sean de aspecto normal.
-Búsqueda de lugares de estancia poco habituales.
-Cambios de carácter.
-Señales de intolerancia a las caricias en la tripa.
-Ligera tendencia a la protusión peneana.

Ante un gato con alguno de estos signos deberíamos realizar los análisis necesarios para poder llegar a un diagnóstico. El problema es que casi nunca habréis sido lo suficientemente observadores como para daros cuenta de ellos, y acudiréis al veterinario cuando los signos mencionados han pasado a ser síntomas más que evidentes de que algo no marcha bien.
Así nos encontraremos en la mayoría de las ocasiones con gatos que presentan un historial claro de disuria (emisión dolorosa o difícil de la orina) y polaquiuria (emisión anormalmente frecuente de orina), con palpación dolorosa de una vejiga bastante llena. La mayoría de estos gatos suelen presentar hematuria (sangre en la orina). Estos gatos normalmente ya han perdido algo de su apetito habitual, han disminuido su actividad, y han presentado algún vómito.

En otras ocasiones nos encontraremos con gatos obstruidos, que son incapaces de orinar, y que presentarán falta de acicalamiento, decaimiento y deshidratación. Estos gatos requerirán atención urgente, ya que normalmente son animales con anorexia, debilidad, depresión, vómitos, dolor abdominal, deshidratación e hipotermia. Además, debido al reflujo de orina a los riñones, se podrán presentar complicaciones renales como azotemia acidosis (aumento de urea en sangre), hipercaliemia (aumento de potasio en sangre) e hiperfosfatemia (aumento de fósforo en sangre).

Ante un gato obstruido y una vez solucionada la obstrucción y estabilizado, tendremos que preocuparnos de saber la composición de los cristales que han sido capaces de formar los cálculos que han provocado el problema. Para ello es indispensable la realización de un análisis de la orina, previa centrifugación, aunque realmente la identificación definitiva sólo es posible mediante análisis por métodos físicos.

Los cristales más frecuentes en el gato son los de estruvita (fosfato amónico magnésico), que se forman en orinas con un pH superior a 6,5. Los cristales de oxalato cálcico se forman en pH neutros, ácidos, o alcalinos, aunque lo más frecuente es que aparezcan en pH ácidos, es decir en aquellos inferiores a 6. Los clínicos veterinarios estamos asistiendo en los últimos años a un aumento de este tipo de cálculos, quizás debido a la inclusión en muchos piensos de sustancias acidificantes de la orina para evitar la formación de aquellos cálculos que se forman en pH alcalino, es decir los de estruvita. Quiero decir con esto que, quizás estemos previniendo la aparición de unos y fomentando la aparición de otros. Creo que los nutrólogos deberían empezar a preocuparse de esta cuestión a la hora de formular los piensos que estamos utilizando en nuestros gatos. Esto que comento, es tan sólo una apreciación personal, que es negada con contundencia por muchos veterinarios. Lo que si es cierto, es que la incidencia de este síndrome, por lo menos en nuestra clínica, está claramente en descenso en los últimos años, merced sin duda a la mejora nutricional que se ha producido en nuestros gatos.

Otros tipos de cálculos que nos podemos encontrar en las uretras y vejigas de nuestros gatos son los de urato amónico, fosfato cálcico, y cistina.

Lo cierto es, cómo he comentado anteriormente, que los signos clínicos como la eliminación de orina en sitios inadecuados, presencia de hematuria, disuria, y polaquiuria, no implican siempre obstrucción uretral, ya sea total o parcial, por urolitos o por tapones uretrales. Salvo en el caso de los gatos obstruidos, será bastante complicado establecer la causa de los signos y síntomas que presentan los afectados por SLUTD. Es por esto que como habéis leído más de la mitad de los casos son considerados como idiopáticos, es decir de causa desconocida.

Los procedimientos de desobstrucción de un gato que es incapaz de orinar, comprenden la sedación e incluso la anestésia general para introducir la sonda en el conducto uretral peneano. Dado que en muchas ocasiones el estado de estos gatos es bastante malo, se hará necesaria la rehidratación por vía intravenosa, y el uso de analgésicos y antibióticos. Si el gato lleva si orinar más de 24 horas, debemos contar con la posibilidad de que se produzca su muerte a pesar de los esfuerzos que todos los veterinarios ponemos para resolver este tipo de problemas, debido a que suelen presentar una insuficiencia renal posrenal u obstructiva. Además estos gatos suelen presentar alteraciones de la coagulación, y elevados niveles de potasio que pueden comprometer su vida. Muchos de estos animales sufrirán una insuficiencia renal crónica que provocará un fracaso renal irreversible.

Si mediante estas técnicas no conseguimos solucionar el problema habrá que realizar lo que se conoce como uretrostomía perineal, y que consiste básicamente en eliminar el estrechamiento de la porción peneana de la uretra. Está técnica quirúrgica implica la amputación del pene del gato, y la castración si es que el animal está entero. Sí además, hemos visualizado cálculos en la vejiga, se impondrá la eliminación quirúrgica de los mismos.

Una vez solucionado el problema puntual que supone la obstrucción en un gato, nos debemos preocupar de evitar las recaídas, tanto si hubo que realizar la uretrostomía como si no. Para ello, una vez identificados los minerales que han formado los cálculos que dieron lugar a la obstrucción, se impone normalmente un cambio radical en la alimentación.

Si los cálculos eran de estruvita deberemos utilizar acidificantes urinarios, ya que mantener el pH de la orina entre 6-6,5 es fundamental. Además, debemos conseguir el aumento del volumen urinario haciendo que el gato beba más. Para ello se deben utilizar principalmente las dietas secas o húmedas que muchos fabricantes de piensos tienen en el mercado y que cumplen perfectamente estos fines. Puedo afirmar, que en muchos casos, estas dietas son capaces por si mismas de disolver algunos de estos cálculos presentes en la vejiga.

Si los cálculos son de oxalato, existen también dietas adecuadas para evitar su recurrencia, aunque a diferencia de las dietas preparadas para la estruvita, no son capaces de disolverlos.

Recientemente se ha presentado en el mercado una dieta adecuada para ser ingerida por gatos que han presentado cálculos, independientemente del tipo de que se traten.

El control y tratamiento de los gatos con cistitis idiopática sigue siendo un reto clínico importante, ya que muchas veces los síntomas remiten de forma espontánea a los pocos días, pero vuelven a recurrir en muchos animales al cabo de pocos días o semanas. Son muchos los medicamentos utilizados en los gatos que presentan este problema como antibióticos, antiespasmódicos, corticoesteroides, antidepresivos, modificaciones dietéticas, acidificantes urinarios, y sueros por vía subcutánea, sin conseguir una respuesta positiva. El más utilizado en los últimos tiempos ha sido la amitriptilina, pero al igual que ha dado excelentes resultados en algunos gatos, en otros no ha sido así. Es un medicamento cuyas dosis son muy variables, y que por tanto deben ser ajustadas en cada animal, y cuyo uso requiere un control de las enzimas hepáticas.

Como siempre decimos, es mejor prevenir que curar, y más habiendo leído lo que os he contado en el artículo. Es por tanto de suma importancia que observéis la bandeja de vuestro gato, y que os familiaricéis con sus costumbres a la hora de la micción. Cualquier cambio que se presente en ellas, os puede estar avisando de que necesita con urgencia la visita al veterinario. No esperéis a que no orine, porque a veces puede ser demasiado tarde.

CUADRO: CAUSAS DE LA ENFERMEDAD DEL TRACTO URINARIO BAJO DEL GATO
-Alteraciones metabólicas: urolitos o tapones uretrales
-Enfermedades inflamatorias: -infecciosas: virus, bacterias, hongos.
-no infecciosas: inmunomediadas
-Traumatismo
-Desórdenes neurológicos (espasmo uretral, atonía de la vejiga)
-Causas iatrogénicas: catéter uretral, uretrostomía
-Anomálias anatómicas: divertículo vesicouracal
-Neoplasias: -benignas (fibroma, hemangioma)
-malignas (carcinoma de células de transición, adenocarcinoma, linfosarcoma)[/b]
 

TULI

Experto
PEQUESSAU:

Ya , pues pienso que tendrá alguna rotura en el riñon y hacerle una ecografia...pues claro que es mejor a un veterinario especializado en gatos para tener una segunda opinion ... y puedo buscarlo y dime que comunidad autonoma española estás ?
 

PEQUESSAU

Usuario
Triskel, mi Klin es un gato muy muy delicadito, fijate si es delicado que cuando ha estado malito y hemos tenido que darle medicamentos, xjmplo calmoxyl hemos tenido que darselo con protectores de estomago xq se ponia con vomitos.
Nació criptorquido unilateral y le extirpamos el testiculo abdominal, se estresó muchísimo con el collar isabelino y se quedó en los huesos, me ha costado meses que coja un peso normal...
Se que parece raro no querer operarle pero es que no le veo pasando un postoperatorio así. Si tiene displasia, como parece ser, habría que ponerle una protesis y no quiero ni pensarlo lo mal que lo pasaría...
Por lo visto, si es absolutamente necesario anestesiarle para hacerle la radiografía.
si conoces a algún vete que lo haga sin anestesis te estaría infinitamente agradecida si me pasaras su número de teléfono. Gracias!!


quote name='Triskel' date='Mar 11 2009, 02:24 PM' post='169246']
¿No operarle?
No lo entiendo muy bien.
Si el gato tiene problemas en la cadera hay que hacer diagnostico ya, y si es necesario operarle. Si , por desgracia, la operacion en la cadera es necesaria podeis aprovechar y esterilizarlo y así solo pasa por una operacion.
El tema de la cadera en los Maine Coon es muy importante, conozco mas de un caso de gatos con displasia, todos de la misma raza. Por favor, no lo dejes pasar y revisarle ese problema cuanto antes.

PD: ¿Necesitan anestesiarlo para hacerle una radiografía?
[/quote]
 

PEQUESSAU

Usuario
Le hemos hecho ecografía y esta todo ok.
Vivo en Madrid, aquí por lo visto hay una clinica especializada en gatos, no se que tal será.



name='TULI' date='Mar 11 2009, 03:52 PM' post='169267']
PEQUESSAU:

Ya , pues pienso que tendrá alguna rotura en el riñon y hacerle una ecografia...pues claro que es mejor a un veterinario especializado en gatos para tener una segunda opinion ... y puedo buscarlo y dime que comunidad autonoma española estás ?
[/quote]
 

Triskel

Usuario Activo
PEQUESSAU , el hacerle una radiografía bajo sedacion depende mas del veterinario que otra cosa. He visto a gatos callejeros pasar por la radiografía sin anestesia, por un lado por que no podían anestesiarlos por su estado y por otra por que muchos gatos son bastante dóciles y se dejan hacer la radiografía sin problemas.
Lo malo es que hay mucho veterinario que siempre tira para lo fácil y seda al gato si o si para cualquier cosa: sacarle sangre, hacerle radiografías...e incluso he llegado a saber de algún "lumbreras" que sedó un gato para hacerle un electrocardiograma, que ya es el colmo de la soberana estupidez (no sirve de nada hacer esa prueba bajo los efectos de la sedacion).
Por eso te preguntaba si era imprescindible sedarlo.
Aqui en Vigo trabajo con un par de veterinarios que no sedan al gato a menos que sea imprescindible (gatos agresivos y no manipulables) ya que no les gusta nada.
Y para que te hagas una idea de como son, a Galahad, uno de mis acogidos, le extrajeron del ojo un cuerpo extraño sin sedacion, simplemente agarrándole la cabeza mientras el veterinario extraía el cuerpo con unas pinzas, y te aseguro que le costo por que era muy pequeño.
Otro lo hubiera sedado por que habría sido lo fácil para el veterinario, pero no para el animal.

Creo que como te han recomendado, es mejor que te busques un veterinario especializado no solo en gatos, si no en maine coons, que algunos hay (por lo que me contó una amiga mía que tiene un maine en Canarias, donde no hay ni uno que sepa sobre esta raza. Precisamente le salio un tumor en una de las patas.)

Ojala no tenga que pasar por ninguna operacion y podáis encontrar otra solución (y un veterinario que pueda hacerle la radiografía sin sedarlo).
 

PEQUESSAU

Usuario
Gracias Triskel,
Voy esta tarde a un veterinario especialista en gatos, no se si concretamente en maine coons pero tienen diversos artículos sobre esta raza en su web. Me dijeron ayer por telefono que si yo quiero (y el gato se deja, claro) esta misma tarde le hacen la radiografía con sedación leve (mi veterinaria habitual solo la hace con anestesia general) Supongo que tendra menos riesgos, no?
Lo malo, que Klin no se va a dejar: no es un gato malo pero está harto de ir al veterinario y además, supongo que si lo mejor para su salud es castrarle casi es mejor aprovechar y hacer ambas cosas a la vez, no crees?
Me da mucho miedo que no elimine la anestesia (o la sedación) y quedarme sin él, que lo quiero con locura...
Ya le anestesiaron dos veces el año pasado ¿no pensais que es arriesgar mucho hacerlo de nuevo?
Por cierto, mi veterinaria habitual anestesia para los cardio....anestesia para todo, incluso para que el peluquero te quite nudos de pelo.
A ver que me dicen esta tarde y os cuento. Gracias!
 

PEQUESSAU

Usuario
Estuve ayer en la Clinica Gattos.
Les enseñe las pruebas de Klin, le exploraron y vieron un vídeo que les llevé sobre su forma de andar y el chasquido que le suena al saltar.
Sobre la sangre en la orina al principio me dijeron que no veían la relación con que estuviera o no castrado, pero finalmente al contarles que vive con una gata (aunque está esterilizada) y que la intenta montar, coinciden con mi veterinaria en que la ansiedad sexual de querer montar a la gata puede ser una fuente de estres para él y de ahí la sangre en la orina. Aunque dicen que igual descartamos eso, es decir le castro y el estres sigue porque viene de otra cosa. Su recomendación es que lo castre para quitarle estres y quizá así solucionar el problema.
Sobre sus patas, al ver el video me dijo que anda raro (preferia haber tenido visiones sobre esto) y al contarle un poco todo lo que le ocurre, pues cree que podría ser displasia, pero para saberlo seguro hay que hacer la radiografía.
Con lo cual, mi veterinaria habitual tenía más o menos razón y he de hacerle ambas cosas. El problema se presenta ahora en elegir donde hacerlo. En Gattos lo hacen con sedación y anestesia local (la castración) y mi veterinaria con anestesia general.
Por una parte veo más seguro el método de Gattos, pero no puedo cambiar de veterinario tan facilmente porque tengo un plan programado y pagado con mi veterinaria para todo el 2009.
¿Que es más seguro la sedación o la anestesia? ¿Qué diferencias hay?
Mi veterinaria dice que con su anestesia se recuperan a los cinco o diez minutos de salir del quirofano. En la clinica de ayer me dijeron que creian que lo que ellos llamaban anestesia era lo mismo que sedación, pero no lo tengo tan claro.
Si solo le sedan y el gato se mueve mientras le estan quitando el testiculo, ¿no hay riesgo de que se desangre o algo así?

¿Que me recomendáis? Me gustaría hacerselo la semana que viene máximo y Estoy muerta de miedo