Ante todo, saludos. Me he decidido a consultaros porque, a pesar de haber buscado en el foro y haber visto multitud de casos con diarrea, sigo teniendo dudas.
Tengo un cachorro desde hace dos semanas que desde el principio ha tenido diarrea. Mis sospechas son que en la casa donde nació le destetaron con comida "normal" (es decir, cocinada, ni pienso ni nada parecido) y al llegar a mi casa donde ya tengo otro gato de 4 años se puso a comer pienso (de gatitos, eso sí) y el cambio de dieta le sentó mal.
El problema es que después de casi dos semanas y media sigue igual. Le llevamos al veterinario: nada de fiebre ni parásitos en las heces. Me dijo que le diera una capsulita de Ultra Levura al día (no le ha hecho nada) y que siguiéramos con su pienso de cachorro. Pero la cosa no ha funcionado, incluso empezó a sangrar en las desposiciones, seguramente por una fisurilla o hemorroide.
En mi desesperación por ver que no mejoraba, porque empezó a no controlar el esfínter y cuando llegaba a la arena era un chorreo continuo (perdón por lo gráfico de la expresión), me decidí a darle arroz hervido, y ayer tenía la barrigota hinchada y al hacer caca, además de diarrea se despachó con una buena sesión de pedos... Mi última opción ha sido dejarle en ayunas, por ver si se le recupera la flora intestinal y se regula de una vez: no come nada desde ayer al mediodía, por lo que ya hará veinticuatro horas, y sólo ha hecho dos cacas (antes hacía cuatro, cinco y seis por día) un poquito más consistentes (tampoco mucho, pero bueno).
Mi duda ahora es si dejarlo en ayunas un día más o empezar otra vez, poco a poco, con el pienso, porque es muy pequeños (apenas dos meses), está creciendo mucho y no quiero que afecte a su desarrollo. Y tampoco sé si seguir con la Ultra Levura o dejarla, porque parece no hacerle nada y tampoco quiero que le perjudique.
Por cierto: el gato está contento, animado, no para de jugar y no se le ve para nada enfermo. Tampoco ha vomitado ni nada parecido, y cuando se le da comida se la come con todas las ganas del mundo; bebe mucho y en definitiva parece un gato sano excepto por la diarrea.
Espero no haberme enrollado mucho y haberme explicado bien. Es que ya no sé qué hacer, de verdad.
Tengo un cachorro desde hace dos semanas que desde el principio ha tenido diarrea. Mis sospechas son que en la casa donde nació le destetaron con comida "normal" (es decir, cocinada, ni pienso ni nada parecido) y al llegar a mi casa donde ya tengo otro gato de 4 años se puso a comer pienso (de gatitos, eso sí) y el cambio de dieta le sentó mal.
El problema es que después de casi dos semanas y media sigue igual. Le llevamos al veterinario: nada de fiebre ni parásitos en las heces. Me dijo que le diera una capsulita de Ultra Levura al día (no le ha hecho nada) y que siguiéramos con su pienso de cachorro. Pero la cosa no ha funcionado, incluso empezó a sangrar en las desposiciones, seguramente por una fisurilla o hemorroide.
En mi desesperación por ver que no mejoraba, porque empezó a no controlar el esfínter y cuando llegaba a la arena era un chorreo continuo (perdón por lo gráfico de la expresión), me decidí a darle arroz hervido, y ayer tenía la barrigota hinchada y al hacer caca, además de diarrea se despachó con una buena sesión de pedos... Mi última opción ha sido dejarle en ayunas, por ver si se le recupera la flora intestinal y se regula de una vez: no come nada desde ayer al mediodía, por lo que ya hará veinticuatro horas, y sólo ha hecho dos cacas (antes hacía cuatro, cinco y seis por día) un poquito más consistentes (tampoco mucho, pero bueno).
Mi duda ahora es si dejarlo en ayunas un día más o empezar otra vez, poco a poco, con el pienso, porque es muy pequeños (apenas dos meses), está creciendo mucho y no quiero que afecte a su desarrollo. Y tampoco sé si seguir con la Ultra Levura o dejarla, porque parece no hacerle nada y tampoco quiero que le perjudique.
Por cierto: el gato está contento, animado, no para de jugar y no se le ve para nada enfermo. Tampoco ha vomitado ni nada parecido, y cuando se le da comida se la come con todas las ganas del mundo; bebe mucho y en definitiva parece un gato sano excepto por la diarrea.
Espero no haberme enrollado mucho y haberme explicado bien. Es que ya no sé qué hacer, de verdad.