Llebaba muy poco tiempo en casa y casi no le conocía. Sin embargo ha sido un golpe muy duro. Ya hace 3 semanas que se le veía mal, que dejó de comer. Pero parecía haberse recuperado.
De repente dió un bajón tremendo. El fin de semana le veía que se iba. Hoy le han examinado y tenía un tumor en el hígado. Cuando el veterinario me lo dijo me puse en lo peor. Parecía que tenía una cicatriz de una operación previa, y eso eran muy malas noticias. Desde ese momento el veterinario me sugirió que tal vez le habían abandonado para ahorrarse el tratamiento.
Decidí intentarlo. Había una posibilidad de que fuera operable, pero una vez abierto, se confirmó que ya le habían operado antes y que todo el hígado estaba afectado. Un gato no puede vivir sin hígado y despertarle hubiese sido cruel. Así es como ha muerto.
Puedo hablar poco sobre él. Alguien le abandonó. Le encontraron en un lugar donde no es lógico pensar que le perdieran. Además no le asustaba la calle ni la gente. Hubiese sido muy fácil encontrarle.
Quiero pensar que la persona que le cuidó de pequeño, que le convirtió en el gato altamente socializado y cariñoso que era, que le castró, que le operó del hígado, no es la persona que lo abandono cruelmente. Quiero pensar que esa persona murió y que algún heredero decidió abandonar al gato. Sea como fuera además de la crueldad del abandono de un gato muy sociable, hay que añadir la crueldad de abandonar a un gato enfermo. No tenía ninguna oportunidad de sobrevivir solo.
Cuando le encontraron estaba hambriento y pasaba frío. Probablemente hubiese muerto pronto. Me alegro de que le recogieran antes. De que haya vuelto a conocer el calor de una casa, de una familia. Mejor dicho de dos. Porque Iris y Alfa querían quedárselo, pero decidieron que no podía ser. Me alegro de que no haya muerto en su casa. Creo que hubiese sido demasiado duro para ellos. He estado hablando con Iris. Más bien llorando con ella. Ha sido muy duro para todos.
En casa están todos tristes. Era un gato con mucha personalidad. Extremadamente hogareño. Han sido solo dos meses, pero su ausencia es muy dura de superar.
Pero estaba muy mal, este era su momento. Ahora se ha acabado su sufrimiento. Por lo menos han sido muy pocos días los que estaba tan mal. Los días anteriores se notaba que le pasaba algo pero no parecía sufrir, eso es algo que me alivia mucho.
Luchi, se muy feliz en la otra vida. Realmente te lo mereces. Me gustaría poder contar más cosas sobre ti, pero no hemos tenido tiempo para conocernos.
Hasta siempre cariño.
De repente dió un bajón tremendo. El fin de semana le veía que se iba. Hoy le han examinado y tenía un tumor en el hígado. Cuando el veterinario me lo dijo me puse en lo peor. Parecía que tenía una cicatriz de una operación previa, y eso eran muy malas noticias. Desde ese momento el veterinario me sugirió que tal vez le habían abandonado para ahorrarse el tratamiento.
Decidí intentarlo. Había una posibilidad de que fuera operable, pero una vez abierto, se confirmó que ya le habían operado antes y que todo el hígado estaba afectado. Un gato no puede vivir sin hígado y despertarle hubiese sido cruel. Así es como ha muerto.
Puedo hablar poco sobre él. Alguien le abandonó. Le encontraron en un lugar donde no es lógico pensar que le perdieran. Además no le asustaba la calle ni la gente. Hubiese sido muy fácil encontrarle.
Quiero pensar que la persona que le cuidó de pequeño, que le convirtió en el gato altamente socializado y cariñoso que era, que le castró, que le operó del hígado, no es la persona que lo abandono cruelmente. Quiero pensar que esa persona murió y que algún heredero decidió abandonar al gato. Sea como fuera además de la crueldad del abandono de un gato muy sociable, hay que añadir la crueldad de abandonar a un gato enfermo. No tenía ninguna oportunidad de sobrevivir solo.
Cuando le encontraron estaba hambriento y pasaba frío. Probablemente hubiese muerto pronto. Me alegro de que le recogieran antes. De que haya vuelto a conocer el calor de una casa, de una familia. Mejor dicho de dos. Porque Iris y Alfa querían quedárselo, pero decidieron que no podía ser. Me alegro de que no haya muerto en su casa. Creo que hubiese sido demasiado duro para ellos. He estado hablando con Iris. Más bien llorando con ella. Ha sido muy duro para todos.
En casa están todos tristes. Era un gato con mucha personalidad. Extremadamente hogareño. Han sido solo dos meses, pero su ausencia es muy dura de superar.
Pero estaba muy mal, este era su momento. Ahora se ha acabado su sufrimiento. Por lo menos han sido muy pocos días los que estaba tan mal. Los días anteriores se notaba que le pasaba algo pero no parecía sufrir, eso es algo que me alivia mucho.
Luchi, se muy feliz en la otra vida. Realmente te lo mereces. Me gustaría poder contar más cosas sobre ti, pero no hemos tenido tiempo para conocernos.
Hasta siempre cariño.