Estaban en un avión un inglés, un ruso, un italiano, un alemán y un español.
Cuando de repente el motor del avión explota, el piloto desesperado se pone un paracaíadas y salta del avión en llamas.
Los pasajeros también desesperados van a buscar otros paracaídas, ... pero sólo encuentran uno.
¿Quién va a saltar? - grita el inglés.
El ruso muy rápidamente saca dos fósforos de su bolso y dice lo siguiente:
Quien consiga formar el número más alto con estos dos fosforitos, se lleva el paracaídas.
El inglés muy apresurado fue el primero en tomar los fósforos:
Y dijo:
- Dos: uno más uno es dos, .... ¡el paracaídas es mío!
Luego siguió el ruso:
Dijo:
- V: en números romanos es cinco, ... ¡el paracaídas es mío!
El italiano fue el tercero:
Y dijo:
- X, en números romanos es diez, ... ¡el paracaídas es mío!
Luego fue el turno alemán...
Y con seguridad dijo:
- En números romanos L es cincuenta, el paracaídas es mío!
En el momento en que el alemán cantaba victoria y se ponía el paracaídas, el español tomó los fósforos se levantó e hizo lo siguiente:
Y dijo:
Ja, ja, já, dénme el paracaídas, .... ¡yo gané!
¡Sesenta y nueve!